Escena 1: Una tranquila velada en nuestro bar de siempre cuando, de repente, vemos como el camarero sirve una copa con Chivas 12 años a un tipo que está en la esquina de la barra. Seguidamente, el tipo le echa coca cola a aquello. Comentario adicional: ¿le regalamos una de Chivas 18 años "a ver que pasa"? Escena 2: Wilhemsson va a sacar billete para el metro. Un chaval se sitúa justo detrás de él y comienza a rascarse lentamente el rabo. Comentario adicional: juro que pensé que lo iba a penetrar allí en medio. Escena 3: Voy caminando por la calle y veo a quien parece ser un obrero con el pantalón medio caído, una buena proporción de gayumbo al aire y la camiseta levantada utilizando su barriga como instrumento de percusión. Comentario adicional: por algún motivo, la escena me pareció un tanto extraña.
Escena 4: Un tipo le tira una pelota de tenis a su perro, un cachorrillo. El perro va hacia la pelota y se queda mirándola. Es igual de grande que su cabeza. Mira a su dueño para que vaya a por ella y se la tire de nuevo.
Comentario adicional: por endulzar la entrada un poco, vamos.
Hoy nos ha dejado Paco de Lucía, el que posiblemente fuese uno de los mejores guitarristas del mundo y que con toda seguridad era y será toda una leyenda de las seis cuerdas. Hasta siempre, maestro.